A LA OPINION PUBLICA

Estimada Maestra Abelina López Rodríguez y Secretario de Seguridad Pública de Acapulco,

Reciban un respetuoso saludo de VOCES, un grupo formado por miembros de la sociedad civil, profesionistas, empresarios e intelectuales comprometidos con el bienestar y el desarrollo continuo de nuestro querido puerto de Acapulco. Nos dirigimos a ustedes con el fin de expresar nuestra profunda preocupación ante la situación que actualmente enfrenta nuestra comunidad.

Acapulco está agonizando. Su belleza, sus playas, su historia y la calidez de su gente han sido el rostro de México ante el mundo, pero hoy este puerto emblemático se encuentra en un estado crítico. No solo enfrenta las heridas visibles y profundas que dejó el Huracán Otis, sino también los daños invisibles que nos estamos causando al impedir su recuperación con bloqueos constantes en las principales vías. Estos bloqueos agravan la crisis, alejando al turismo, frenando la economía y cerrando las puertas a quienes desean ayudar y reactivar nuestra comunidad.

Entendemos el dolor y la desesperación de la ciudadanía. Sabemos que las carencias son muchas y que la frustración aumenta con cada día que pasa sin respuestas claras y efectivas. VOCES, como un colectivo de expresión ciudadana apartidista, integrado por amigos y personalidades del puerto, se solidariza profundamente con todas las familias que han perdido sus hogares, su sustento y su tranquilidad. Exigimos a las autoridades que atiendan con urgencia las necesidades de nuestra población y respondan a quienes han sido ignorados por demasiado tiempo.

No obstante, también solicitamos con firmeza que se garantice la libre circulación en Acapulco. Nuestro puerto necesita reconstruirse, abrir sus puertas y recibir con brazos abiertos a quienes desean regresar, disfrutar y contribuir a nuestra recuperación económica. Necesitamos también contar con vialidades transitables y calles pavimentadas.

Además, los bloqueos no son solo un obstáculo en las calles; son un cerco que asfixia la esperanza y el progreso de todos. Hoy, más que nunca, necesitamos actuar en unidad y pensar en el bien común, en un Acapulco donde cada ciudadano tenga la oportunidad de salir adelante sin afectar a los demás.

A las autoridades, les pedimos con respeto, pero con urgencia, que tomen acción efectiva y demuestren sensibilidad hacia las necesidades de todos los acapulqueños. A nuestros hermanos y hermanas, les pedimos solidaridad, paciencia y, sobre todo, unidad. Este puerto es nuestro, y si no trabajamos juntos para protegerlo, corremos el riesgo de perderlo para siempre.

La vida de Acapulco depende de cada uno de nosotros. No dejemos que muera por nuestras propias manos. Salvemos a nuestro puerto antes de que sea demasiado tarde.

Atentamente,

David Aguilar González

Enrique Caballero Peraza

Guido Rentería Rojas