Delfino Campos
La crónica de un pueblo y una política racista y discriminatoria. Una política racista, capitalista y empresarial. Vamos, la cerrazón de un presidente que no es político sino empresario. Es la historia que se repite en un país de discriminación y racismo. Muros para impedir el paso del desarrollo y un movimiento tan indispensable para las buenas relaciones en el ámbito bilateral y mundial. Otra vez la política migratoria y los aranceles nefastos de más del 25 % para con México, vaya, rollo.
El nerviosismo y las dudas surgen otra vez en México. ¿Qué va a pasar? Nada, que sin mexicanos se va a quedar solo los Estados Unidos, simplemente no va a funcionar. La mano de obra barata de los mexicanos mantiene al vecino país del norte en movimiento y desarrollo, eso es innegable para el que ve la realidad.
Sin los mexicanos, la economía de los Estado Unidos se va a ver seriamente afectada. Es más, los estados de California y Texas, entre otros, se han visto ya en la desolación con las primeras deportaciones ocurridas La zona fronteriza con México se va a militarizar. Con esto, ¿se va a frenar el flujo migratorio. No lo creo así.
La migración es un movimiento indispensable para el funcionamiento de cualquier país. La migración es el elemento necesario en el desarrollo de los países Los impuestos, si bien es cierto son la base para el desarrollo de los pueblos, éstos deben ser aplicados de manera justa y equitativa.
De la economía de un país depende el desarrollo de otro país. Eso está claro. Cierto, cada nación cuida su propia economía al igual que su territorio, pero hay que entender que debe haber una interrelación entre las naciones sin conflictos. A esto le vamos a llamar desarrollo. Tal vez esto es un sueño utópico pero las naciones del mundo que van con miras a unificarse para lograr un desarrollo pleno.
De las relaciones internacionales depende el funcionamiento del mundo. La política internacional debe perseguir, utopía tal vez, el desarrollo del mundo con miras a la globalización, esto, si hablamos de una igualdad. Las guerras son la contraparte del desarrollo. Las guerras son sinónimo de ambición desmedida.
A Trump se le olvida que también él es hijo de inmigrantes tampoco se acuerda que tiene demandas jurídicas y sin embargo allá en el norte no nos bajan de baja ralea. Nos llaman como ellos quieren. Los paisanos radicados USA en la práctica están en su tierra porque nos quitaron más de la mitad de nuestro territorio. Si USA nos bloquea comercialmente podemos comerciar con otros países. No estamos solos. Al contrario, hay que dejarlo solo. Olvida el señor Trump que toda la mano de obra la hacen los mexicanos. México está preparado para recibir a nuestros compatriotas…salud…