Por Recalentado
*Y en esta esquinaaaa… los que están a favor de que no se diga nada de que hay cocodrilos en la bahía. Y de esta oooootraaaa los que dicen que hay que ser responsables, no alarmistas, pero sí avisar a los vacacionistas que por el huracán John se escaparon 40 “chamise Lacoste” de un criadero en Barra Vieja.
*Los que están a favor de que no se diga nada, han estado generando una campaña con videos desde lugares turísticos de Acapulco, restaurantes, sitios de interés invitando a que vengan los turistas al destino, asegurando que todo está bien y funcionando… y es que dicen, la realidad es que no tienen consumidores y los costos de sueldos más operativos los tienen a borde del cierre.
*Por su parte, los que se van por la idea de que se debe ser responsable y honesto con quienes nos visitan, para advertirles que apenas van 9 cocodrilos recuperados de los 40 que huyeron, consideran que si sucediera algo que lamentar con algún visitante, la imagen del puerto sería mil veces afectada y difícil de salir de esa percepción una vez que pudiera estar sin caimanes el mar.
*Ahora bien, si lo que permite la subsistencia de la gente de Acapulco son sus playas, su mar, la bahía, y ésta se encuentra en una situación de riesgo para el vacacionista, entonces tanto los que están a favor de que se oculte como los que dicen que se avise, debieran concentrarse en elevar una exigencia mayor a las autoridades correspondientes, para que le dediquen especial atención, más de la que actualmente le están dando, en ubicar y sacar a los cocodrilos del mar.
*No se trata de solo gasten y gasten mucha gasolina y esfuerzo físico (que sí debe de realizarse), pero para eso está el uso de herramientas tecnológicas actuales como son los drones con cámaras, por poner sólo un ejemplo. Así como tomar medias temporales drásticas en tanto no se garantice la seguridad del bañista. Y no hay que espantarse, en los principales balnearios internacionales si es necesario cierran sus playas un tiempo, hasta que todo vuelve a la normalidad… pero bueno, estamos en Acapulco, donde priorizan otro tipo de intereses antes del bien común.
*Y como sino le hicieran falta problemas a Acapulco, el pasado jueves 10 de octubre estuvo lo que le sigue de caos al realizarse tres diferentes bloqueos, todos por parte de quienes se dicen damnificados por el huracán John, que con razón o no, aseguran no haber sido atendidos para darles apoyos y censarlos por parte del gobierno federal.
*Por cierto otra vez estuvo en Acapulco la nueva secretaria federal de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora, vino el pasado 8 de octubre, acompañando a la secretaria federal del Bienestar Ariadna Montiel y a la gobernadora Evelyn Salgado, para el arranque de las brigadas interinstitucionales que atenderán las zonas afectadas por las inundaciones y deslaves…. El detalle es que hasta donde se sabe, no se ha reunido con los turisteros del puerto, y como que sí urge mínimo una plática para conocer cuál será la política turística nacional en la que se debiera contemplar darle promoción a Acapulco.
*Se tiene conocimiento de que acompañará Josefina Rodríguez a la presidenta de México Claudia Sheinbaum en su segunda visita -que no gira- por Acapulco, donde sostendrá reuniones en la Base Naval para conocer el avance de los trabajos de recuperación del puerto. Y hasta donde se sabe la secretaria de Turismo no tendrá reuniones con los del sector turístico porteño, aunque tampoco a los locales se les ve como muy apurados por tener una reunión con ella.
*Muy mal se vieron las autoridades municipales de Acapulco, que esta ocasión encabezó la secretaria de Gobierno, Leticia Lozano Zavala, al tomarse fotos sonriendo para el recuerdo en el mausoleo por los muertos en el huracán Paulina, en la ceremonia de conmemoración del duelo por el lamentable hecho ocurrido el 9 de octubre de 1997. Ante situaciones como estas, se debiera ver la necesidad de brindarles cursos de inteligencia emocional a los funcionarios, para que mantengan las formas en los diferentes eventos conmemorativos.