Como resultado del reforzamiento de las medidas sanitarias para “salvar” la temporada turística de Navidad y Año Nuevo, el Gobierno de Acapulco ha logrado controlar la epidemia de COVID-19, en coordinación con dependencias federales y estatales, informó la presidenta municipal Adela Román Ocampo.
En conferencia de prensa celebrada en la Sala de Cabildo “Juan R. Escudero”, la alcaldesa presentó un balance con funcionarios encargados de super visar y promover la aplicación de los protocolos preventivos para contener la transmisión del virus SARS-CoV-2 en el municipio; también invitó a los ciudadanos a evitar la celebración de peregrinaciones guadalupanas para evitar nuevos contagios.
Contrario a la tendencia mundial y nacional en aumento de contagios, ocupación de camas hospitalarias y decesos, en Guerrero y particularmente en Acapulco, “hemos logrado mantener bajo control hasta el momento esta epidemia”, destacó Román Ocampo; a su vez, la directora general de Salud Municipal, Roxana Tapia Carbajal, destacó que se tiene un registro de 10 mil 494 casos acumulados y que actualmente hay en el municipio 135 casos activos y mil 178 defunciones por COVID-19.
La alcaldesa llamó a los ciudadanos a no bajar la guardia ni confiarse relegando las medidas sanitarias, al advertir que “estamos expuestos a un gran riesgo debido a la cercanía que tenemos con la Ciudad de México y el Estado de México”, entidades de donde provienen el mayor número de visitantes y que actualmente se encuentran a punto de regresar al semáforo rojo por el incremento de ocupación hospitalaria y de decesos.
Al respecto, el secretario de Turismo, José Luis Basilio Talavera, indicó que se han reforzado las medidas de prevención en hoteles, restaurantes y establecimientos localizados en la franja turística, donde se supervisa rigurosamente el uso de cubrebocas, la toma de temperatura, tapetes para desinfectar calzado en los accesos y la sana distancia, además de no rebasar el aforo permitido del 50 por ciento de acuerdo a su capacidad.