Unos son festejos, otros conmemoraciones.
Conmemoraciones: 1 de Mayo, Día del Trabajo. 5 de Mayo la Batalla de Puebla.
Festejos: 10 de Mayo Día de las Madres, 15 de Mayo Día del Maestro y 23 de Mayo Día del Estudiante.
Lo típico es quedarnos en el festejo ligero, pero la verdad es que debemos analizar más nuestro entorno. En el caso del Día del Trabajo, se requieren empresas fuertes para que haya mejores condiciones laborales y que el trabajador tenga sus beneficios completos y no recurra al subempleo o la informalidad.
El Día de las Madres es una de las fechas más emblemáticas y manipulable posible, eso es lo paradójico. Así que si algo se puede hacer, más allá del reconocimiento y festejo tradicional (lo cual es bueno), se debe de pensar en que las condiciones para las madres que trabajan, solteras, que están en su hogar, no son las más optimas en estas fechas. Hay mucho por hacer en ese sentido.
Los maestros merecen todo nuestro reconocimiento y admiración, para quienes aún en condiciones adversas su vocación los hace salir adelante en bien del conocimiento de sus educandos.
El estudiante, para como está la situación, deben de ser atendidos de manera especial, más cuando ha crecido la tendencia de que aspirar a mejores condiciones en grado académico, profesional y personal está siendo juzgado. Los jóvenes son quienes irán asumiendo la parte medular del país, por lo tanto deben estar más y mejores preparados. Tener visión de futuro y crecer junto con sus metas, aspiraciones y comunidad que lo rodea.
Así que tenemos todo este mes, para al menos pensar en cada uno de estas conmemoraciones y festejos, para ir más allá de un tradicional recordatorio o celebración.